· loibner & díaz

...decía Mathias, tomando un café antes de la prueba de sonido, que para ser zanfonista hay que estar considerablemente trastornado. Damos fe de que es cierto -ojito al pantalón de pijama que no se quitó ni para el concierto-. Germán Díaz observa atentamente la funda de tela que forra la pantalla del mac, junto a la pedalera de Mathias: ha prometido hacerle una funda de ganchillo, para dársela la próxima vez que vuelva.

Ambos están locos, es cierto, y se lo perdonamos: son -además de nuestros amigos- los mejores zanfonistas del mundo.